El ministro de Agricultura, Luis Planas, tras reunirse a lo largo de la semana con los distintos agentes de la cadena del aceite de oliva, ha anunciado las medidas a corto, medio y largo plazo en las que trabajar para afrontar las dificultades de este sector. En total ha presentado diez medidas que tienen que ver con la regulación de la oferta; la calidad, la trazabilidad y el etiquetado; la promoción y la futura PAC.
No obstante, además de las anunciadas, las principales organizaciones agrarias -ASAJA, COAG y UPA- y las Cooperativas han reclamado medidas adicionales que impulsen los precios en origen.
El presidente de ASAJA, Pedro Barato, considera que la propuesta del Gobierno es un «plan ambicioso que, de cumplirse, puede solucionar parte de lo que el sector está demandando». Sin embargo, a su juicio, le falta «un plan de reestructuración del sector con agua y medidas económicas» y más dedicación a la producción tradicional. Asimismo, el también presidente de la Organización Interprofesional del Aceite de Oliva de España, ha recordado que en la mesa de trabajo creada con el Ministerio de Agricultura continuará el seguimiento de los precios.
El responsable de COAG para el aceite de oliva, Juan Luis Ávila, ha asegurado que «si no se resuelve el problema a corto plazo, la mitad del sector no va a poder seguir». Por eso ha pedido otras medidas como la referenciación de precios, de modo que se den instrucciones para facilitar el cálculo de los costes de producción.
Por su parte, el responsable sectorial del olivar de UPA, Cristóbal Cano, ha señalado que las medidas no son suficientes, ya que hacen falta “actuaciones a corto plazo” que cambien la tendencia de precios. Según ha recordado, “no hay tiempo”, porque los agricultores acumulan pérdidas de varias campañas, y ha asegurado que no cree que con las medidas anunciadas se consiga dar ese giro.
El responsable del sector de aceite de Cooperativas Agro-alimentarias, Rafael Sánchez de Puerta, ha celebrado la propuesta para favorecer la autorregulación, “una prioridad absoluta” para reequilibrar el mercado. Sin embargo, considera importante conseguir “de forma inmediata” que en la PAC se incluya el aceite de oliva en un artículo de la reglamentación que permite adecuar la oferta a la demanda de la forma en que ya se admite para el sector del vino y que, a su juicio, serviría para “revertir” el problema de los precios.