Los precios internaciones de los aceites vegetales aumentaron un 12,1% en julio respecto al mes anterior, tras siete meses consecutivos de descensos. Así se desprende del índice de precios de los alimentos, que elabora la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Este pronunciado aumento en julio se debió a la subida de las cotizaciones mundiales de los aceites de girasol, palma, soja y colza.
Los precios internacionales del aceite de girasol repuntaron en más de un 15% respecto del mes anterior. Esto se debe, según detalla la FAO, «fundamentalmente a la incertidumbre en torno a los suministros exportables de la región del Mar Negro tras la decisión de Rusia de poner fin a la aplicación de la Iniciativa sobre la Exportación de Cereales por el Mar Negro».
Mientras tanto, los precios mundiales del aceite de palma también aumentaron como consecuencia de las perspectivas de un crecimiento débil de la producción en los principales países productores.
En cuanto a los aceites de soja y colza, los precios subieron debido a la preocupación ante las perspectivas sobre la producción de soja en Estados Unidos y de colza en Canadá, respectivamente. La subida de las cotizaciones mundiales del crudo también empujó al alza los precios de los aceites vegetales.
Precios mundiales de los alimentos
El índice de precios de los alimentos que elabora la FAO registró un promedio de 123,9 puntos en julio, un 1,3% más que en junio, pero se mantuvo un 11,8% por debajo del valor registrado en el mismo mes del año pasado.
El repunte del índice en julio obedeció a una firme subida del índice de precios de los aceites vegetales, que fue contrarrestada en parte por una disminución importante del índice de precios del azúcar, junto con un descenso reducido de los índices de precios de los cereales, los productos lácteos y la carne.
