Agricultores de la región francesa de Lot-et-Garonne, al sur del país, tomaron el jueves la plaza parisina de La Bastilla con una venta solidaria de 50 toneladas de frutas y verduras. El objetivo de esta acción fue denunciar los abusivos precios fijados por la gran distribución.
Según los datos de los agricultores, en Francia, el productor recibe por el kilo de tomates 1,70 euros frente a los 3 euros a los que lo adquiere el consumidor en los supermercados.