España fue el país de la Unión Europea (UE) que recibió un mayor porcentaje del presupuesto comunitario para programas nacionales de apicultura entre 2013 y 2015, según un informe publicado el 12 de enero por la Comisión Europea (CE).
Nuestro país obtuvo en concreto un 16% de los 33 millones de euros que esta iniciativa destina a la mejora de las condiciones de las colmenas de abejas y los productos derivados de estas en todos los Estados miembros, por delante de países como Francia (11%) y Rumanía (10%).
Según datos de la CE, España es el segundo mayor productor de miel de los Veintiocho y generó 32.200 toneladas del producto en 2015, solo por detrás de Rumanía, que produjo 35.000 toneladas.
El informe revisó la implementación de los programas nacionales de apicultura, que reciben anualmente 33 millones de euros de presupuesto europeo a través de la Política Agrícola Común (PAC) y tienen el objetivo de mantener las colonias de abejas, consideradas «esenciales» para la agricultura y el medio ambiente.
El mantenimiento de colmenas, además de asegurar la reproducción de las plantas mediante la polinización, facilita el desarrollo de áreas rurales y permite producir miel, polen, jalea real y cera de abeja.
Según el texto de la Comisión, las colmenas aumentaron su presencia en los países de la UE hasta alcanzar un total de 15,7 millones entre 2013 y 2015, un aumento del 12 % respecto al anterior periodo revisado (2011-2013).
La mayor producción de miel en la UE tuvo lugar en países como España, Rumanía e Italia, regiones al sur del continente donde las condiciones climáticas son más favorables para la apicultura.
La UE es el segundo productor mundial de miel después de China con una producción anual en torno a las 250.000 toneladas, si bien no produce suficiente para cubrir su propio consumo e importa desde China, México y Ucrania unas 200.000 toneladas (2015).
La publicación de la CE coincide con una petición realizada el 12 de enero por la organización ecologista Greenpeace, que instó al Ejecutivo comunitario a prohibir los pesticidas neonicotinoides.