La autorización para la utilización del cobre en la Unión Europea se ha renovado por un periodo de 7 años y la medida va acompañada de una serie de restricciones y de una disminución de las cantidades que pueden aplicarse respecto a la situación actual.
El ministro de Agricultura francés, Didier Guillaume, ha sido quien ha dado a conocer el acuerdo alcanzado en la UE sobre este producto y ha precisado que las cantidades que podrán utilizarse se han establecido en una media de 4 kilos por hectárea y año y de 28 kilos para el conjunto de los 7 años. Los productores podrán superar los 4 kilos citados en un año determinado si lo compensan con una reducción del uso al año siguiente.
Según Guillaume, este acuerdo permitirá mantener una solución de protección de las plantas mientras se buscan alternativas a este producto. «El recurso a productos y métodos sustitutivos es necesario -ha dicho- dados los riesgos y el impacto potencial del exceso de utilización del cobre sobre el medio ambiente y la salud».