El presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado, ha pedido a los diputados europeos que exijan responsabilidades a la Comisión Europea por los graves perjuicios causados por la Xylella fastidiosa. Según esta organización agraria, los servicios de inspección no detectaron la presencia de la bacteria en los cargamentos vegetales importados de terceros países hasta un año después de que se declarase la enfermedad en una explotación de olivos de Italia.
Esta circunstancia tuvo lugar en 2013 y desde entonces la Xylella se ha extendido también a determinadas regiones de Francia y de España, donde está causando estragos en la Comunitat Valenciana, Baleares y, en menor medida, en Madrid y Andalucía, según la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA).
Sin embargo, «sólo fue a partir de 2014» cuando los datos de la Comisión Europea comenzaron a reflejar casos de Xylella interceptados en partidas de plantas importadas, pero ninguno se consignan las estadísticas oficiales entre 2005, año en que comenzó a funcionar este sistema estadístico sobre sanidad vegetal- y 2013, año en que apareció la enfermedad en Italia.
A partir de ese momento, las cifras de la Comisión relativas a la presencia de Xylella en las importaciones experimentaron un cambio radical y es en 2014 cuando, por primera vez comienzan a constatar de manera oficial la identificación de Xylella.
Según los datos oficiales, en 2014 se registraron cuatro detecciones de la bacteria en plantas de café originarias de Costa Rica y otra detección más en otra planta de café procedente de Honduras. Al año siguiente se produjeron otras dos identificaciones de Xylella y durante 2016, 2017 y 2018 cinco.
Desde 2014, la Comisión Europea reconoce a través de sus propias estadísticas la detección de, al menos, 12 casos de Xylella en partidas de material vegetal de terceros países, lo que, según AVA, «contrasta poderosamente» con los años anteriores.
Aguado ha comentado que «no se puede encontrar lo que no se busca» y ha destacado que la consecuencia es que miles de agricultores «están pagando un alto precio por la negligencia de los que deberían proteger a sus administrados».
A raíz de la aparición de Xylella en distintos cultivos de países de la UE, el Ejecutivo comunitario introdujo ciertas modificaciones en el reglamento de control de la sanidad vegetal de las importaciones con el objeto de endurecer los requisitos, pero el presidente de AVA considera esos cambios «meramente cosméticos» dado que Sudáfrica «continúa introduciendo cítricos infectados» de Mancha negra «a mansalva» mientras la Comisión «sigue mirando hacia otro lado».