Este jueves, 15 de junio, han salido a la calle en Valladolid más de un millar de agricultores y ganaderos de Castilla y León para reclamar al Gobierno central y al autonómico ayudas urgentes para paliar una sequía que ha dejado al sector «en la UCI».
Bajo el lema «La sequía arruina el campo. Ayudas directas y PAC flexible ya», los agricultores, convocados por las organizaciones profesionales agrarias de esta comunidad autónoma (ASAJA, la Alianza UPA-COAG y la Unión de Campesinos de Castilla y León), han pedido un paquete de ayudas de al menos mil millones de euros.
La manifestación ha comenzado frente a la Delegación del Gobierno de España y estaba prevista que concluyera frente a la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural. Las OPAS recuerdan que sus demandas afectan tanto al Ejecutivo central como al autonómico.
Para las organizaciones de productores este acto es un «toque de atención» a las administraciones. Asimismo, han avanzado que, de no recibir una respuesta favorable a sus peticiones, organizarán una protesta a nivel nacional en Madrid antes de las elecciones.
Reivindicaciones
Las organizaciones reclaman ayudas directas y urgentes que ofrezcan «oxígeno» a los agricultores y ganaderos para mantener sus explotaciones. También solicitan una revisión completa de los requisitos de la nueva Política Agraria Común (PAC). Consideran que están suponiendo una dificultad y costes añadidos -y muchas veces sin más lógica que la burocrática- al trabajo de los profesionales.
