La campaña vitivinícola 2018/19 se cerró el pasado 31 de julio con unas existencias de 38,8 millones de hectolitros de vino y mosto, lo que supone un incremento del 29% respecto al cierre de la campaña anterior, según datos publicados por el Ministerio de Agricultura. Este incremento se debió al aumento de la producción y a pesar de que las salidas registraron una mejora.
De los 38,8 millones de hectolitros que había al final de la campaña, 37,12 millones corresponden a vino (+27% respecto a 2017/18) y 1,71 millones a mosto sin concentrar (+98%). Además hay que sumar otros 257.468 hectolitros de otros tipos de mosto (concentrado, concentrado rectificado y parcialmente fermentado).
Considerando el color de los vinos, el stock de tintos y rosados se situó en 22,56 millones de hectolitros y el de blancos en 14,56 millones. Por categorías, las existencias más elevadas corresponden a los vinos con DOP (23,51 millones de hectolitros), seguidos de los vinos sin indicación geográfica (7,29 millones), los vinos varietales sin DOP ni IGP (3,77 millones) y los vinos con IGP (2,54 millones de hectolitros).
Por Comunidades Autónomas, Castilla-La Mancha cerró la campaña con unas existencias de 11,24 millones de hectolitros de vino, Cataluña con algo más de 5 millones y La Rioja con algo menos de 5 millones de hectolitros.
Más producción, más salidas
Hay que recordar que la producción de la campaña 2018/19 fue muy superior a la obtenida en la anterior. En total se produjeron 44,93 millones de hectolitros, un 38% más que en 2017/18.
La comercialización fue algo más alta debido a la mejora de las salidas al mercado interior, ya que las exportaciones disminuyeron ligeramente.
El total de salidas fue de 62,22 millones de hectolitros, un 4,3% más que en la campaña anterior. De ellas, 41,24 millones fueron al mercado nacional, con un crecimiento del 7%. Por su parte, las exportaciones se situaron en 20,97 millones de hectolitros, un 0,7% menos que en 2017/18. Algo más de la mitad del volumen exportado (11,79 millones de hectolitros) corresponde a vinos sin indicación geográfica. Las ventas al exterior de vinos con DOP fueron de 4,66 millones; las de vinos con IGP de 860.254 hectolitros y las de vinos varietales sin DOP ni IGP de 3,65 millones de hectolitros.