Desde el 1 de octubre ha entrado en vigor la fase transitoria del mecanismo de ajuste de carbono en las fronteras (MACF), una de las disposiciones de la política comunitaria en materia de clima cuyo objetivo es igualar el precio del carbono de los productos de la UE y los importados.
Durante esta fase transitoria, el mecanismo se aplicará a un grupo de productos, entre los que figuran los abonos (además del cemento, el hierro y el acero, el aluminio, la electricidad y el hidrógeno).
Durante este período transitorio, los importadores de esas mercancías solo tendrán que notificar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) implícitas en sus importaciones (emisiones directas), sin obligación de efectuar ningún pago o ajuste financiero.
Los importadores deberán recoger datos desde este último trimestre del año, pero dispondrán de plazo hasta el 31 de enero de 2024 para presentar su primera declaración.
La entrada en vigor del sistema definitivo comenzará en 2026
Para ayudar a los importadores europeos y a las instalaciones de los países terceros a poner en práctica las nuevas reglas, desde este domingo está disponible un registro para que los importadores puedan realizar los cálculos y declararlos.
Según Bruselas, este período transitorio servirá de período de aprendizaje para todos los implicados (importadores, productores y autoridades) de cara a la entrada en vigor del sistema definitivo, que comenzará en 2026.
Desde ese año, los importadores tendrán que declarar cada año la cantidad de mercancías importadas en la UE durante el año anterior y sus emisiones de GEI implícitas. A continuación, entregarán el número de certificados MACF correspondiente.
El precio de los certificados se calculará en función del precio medio semanal de subasta de los derechos de emisión expresado en euros por tonelada de CO2 emitido.
Bruselas ha reiterado que este mecanismo permitirá garantizar que las políticas climáticas de la UE no se verán comprometidas por la deslocalización de la producción a países que apliquen normas ecológicas menos ambiciosas o por la sustitución de productos de la UE por importaciones más intensivas en carbono.
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