La producción de vino y mosto en Castilla-La Mancha se situará entre 20,5 y 21 millones de hectolitros, según las previsiones de la Sectorial Vitivinícola de ASAJA de esta Comunidad Autónoma. Esta cifra supone un descenso de entre un 11 y un 13 por ciento con respecto a la campaña anterior.
Según los datos ofrecidos por el Sistema de Información de Mercados del Sector Vitivinícola (INFOVI), en 2016 se produjeron 23,6 millones de hectolitros de vino y mosto en Castilla-La Mancha. Ciudad Real fue la primera provincia productora, con 9,4 millones de hectolitros de vino, seguida de Toledo con 4,7 millones.
La sequía que arrastra esta Comunidad Autónoma desde hace años es la primera causa que explica la merma en la producción que, además de afectar al viñedo de secano, produce que los suelos de regadío no acumulen suficiente humedad.
Otro de los motivos que han provocado una reducción de la cosecha han sido las inclemencias meteorológicas, según la sectorial de ASAJA. Las tormentas de granizo, especialmente en Albacete y Cuenca, destruyeron gran cantidad de fruto, por lo que las primeras estimaciones apuntan a unas cifras inferiores a las del pasado año.
No obstante, si lloviera lo suficiente hasta que se produzca la vendimia, la cosecha podría aumentar, aunque los pronósticos meteorológicos no auguran agua para el mes de agosto.
Los precios de la uva podrían arrancar al alza
En cuanto al mercado y a los precios, los técnicos de ASAJA se han mostrado optimistas, puesto que, teniendo en cuenta las previsiones de cosechas inferiores a nivel nacional e internacional y a las escasas existencias de vino en las bodegas y cooperativas, los precios de la uva «deberían arrancar con precios superiores a los de la campaña anterior».
