El Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales de China ha reconocido que la situación de prevención y control del brote de peste porcina africana (PPA) es «muy grave», ya que se ha extendido a 17 provincias y ha provocado el sacrificio de cientos de miles de cerdos infectados.
Este departamento, junto al de Transporte y Seguridad Pública, ha informado de que el resultado de las investigaciones apunta al transporte de animales entre provincias como causante de la expansión de la enfermedad. Por ello, ha pedido a las autoridades locales que refuercen la supervisión de los envíos interprovinciales de cerdos para evitar que el virus se siga extendiendo.
Asimismo, han señalado que se establecerán puntos de control para «inspeccionar de manera estricta» todos los vehículos que transporten animales vivos, con el objetivo de acabar con la «distribución ilegal».
«Los departamentos de Ganadería y Veterinaria deben reforzar la investigación y los castigos sobre actos ilegales como el transporte de cerdos sin certificado de cuarentena (…) y romper decididamente la cadena del tráfico ilegal», han añadido los Ministerios.
Esta enfermedad ha supuesto una contracción del negocio de muchas cárnicas debido a las restricciones impuestas a la venta
Las autoridades chinas revelaron a principios de septiembre que se habían sacrificado unos 40.000 cerdos debido al brote y, aunque no se han ofrecido nuevas cifras oficiales al respecto, actualmente el número podría ser de «cientos de miles» de animales.
Esta enfermedad, que se declaró el pasado 3 de agosto, ha supuesto una contracción del negocio de muchas cárnicas debido a las restricciones impuestas a la venta de productos porcinos. Incluso, en algunas regiones como Sichuan (centro), han prohibido la importación de carne fresca de cerdo para evitar que se extienda la enfermedad.
Cabe recordar que China es el principal productor y consumidor mundial de cerdo, y que tiene alrededor de 700 millones de cabezas.
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