Con la connivencia de las distintas Comunidades Autónomas
COAG tilda de “tomadura de pelo ministerial” la decisión de no ejecutar el pago de la ayuda nacional a los frutos secos
- Resulta inaceptable y sorprendente que esta ayuda, que ya estaba comprometida en las declaraciones de la PAC 2016 y 2017, no llegue finalmente a los productores.
- Supone un complemento vital para cerca de 400.000 hectáreas de almendros de secano, situadas en zonas de pendiente y escasa pluviometría donde no hay otra alternativa de cultivo.
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) tilda de “tomadura de pelo ministerial” la decisión de no ejecutar el pago de la ayuda nacional a los frutos secos. Resulta inaceptable y sorprendente que esta ayuda, que ya estaba comprometida en la declaración de la PAC 2016 y 2017 y así la han solicitado los agricultores, no llegue finalmente a los productores.
“Ahora vienen con las rebajas, sin explicaciones al sector y riéndose en nuestra cara. Además, la postura de las administraciones regionales es intolerable, porque no sólo dejaron de contribuir con su parte correspondiente de la ayuda en la mayoría de los casos, sino que ahora permiten este atropello” ha lamentado Bernardo Funes, responsable del sector de frutos secos de COAG.
El Ministerio decidió recientemente mediante la publicación del Real Decreto 980/2017 su supresión a partir 2018
Recordemos que esta ayuda para el mantenimiento y mejora de la superficie de frutos de cáscara se venía otorgando desde hace más de 10 años y que, además, el Ministerio decidió recientemente mediante la publicación del Real Decreto 980/2017 su supresión a partir 2018 en contra de las peticiones y reclamaciones del conjunto del sector.
Esta ayuda supone un complemento vital para cerca de 400.000 hectáreas de almendros de secano, situadas en zonas de pendiente y escasa pluviometría donde no hay otra alternativa de cultivo. El cultivo de frutos de cáscara y las actividades ligadas, tienen una gran relevancia desde el punto de vista social y económico en el medio rural, generando tejido social, empleo y ayudando al desarrollo de la población en el territorio. Además, hablamos de un cultivo altamente eficaz en la lucha contra la erosión, desertización y la mejora del paisaje en grandes áreas de nuestro país.
En los últimos años, la administración estatal ha ido reduciendo de forma considerable la dotación de esta ayuda lo que, añadido al aumento de la superficie de frutos de cáscara, ha provocado que en la actualidad el importe de esta ayuda sea de 9€/hectárea.