Los países que más combustibles fósiles producen seguirán contaminando el planeta a niveles muy por encima de lo necesario para limitar el calentamiento global, según un nuevo informe de la ONU (Organización de las Naciones Unidas).
En concreto, esos países, entre los que se encuentran Estados Unidos, Reino Unido, Rusia, China, Brasil, Alemania o Canadá, producirán más del doble de combustibles fósiles en 2030 de lo que haría falta para limitar el calentamiento a 1,5 grados por encima de los niveles preindustriales.
Estados Unidos, Reino Unido, Rusia, China, Brasil, Alemania o Canadá, producirán más del doble de combustibles fósiles en 2030 de lo que haría falta para limitar el calentamiento
El planeta ya es al menos 1,1 grados centígrados más cálido que hace 150 años, pero a partir del umbral de 1,5 grados, la mayoría de científicos estima que los desastres medioambientales, como las olas de calor extremas o las inundaciones, se volverán mucho más intensos y comunes.
Por eso, una gran parte de los compromisos adoptados por la comunidad internacional tienen el objetivo de reducir a 1,5 grados el calentamiento, causado principalmente por la quema de combustibles fósiles. Sin embargo, los planes de estos gobiernos e incluso sus propias proyecciones dibujan un futuro muy diferente.
Por su parte, el comisario europeo de Acción Climática, Wopke Hoekstra, pidió avances mundiales en las medidas de mitigación de la crisis climática para poder aprobar en la próxima Cumbre de Naciones Unidas para el Cambio Climático (COP28) el Fondo de Pérdidas y Daños para los países más vulnerables a ese problema.
A partir del umbral de 1,5 grados, la mayoría de científicos estima que los desastres medioambientales se volverán mucho más intensos y comunes
En un discurso en la Universidad de Nairobi, Hoekstra admitió que “la situación geopolítica que enfrenta el mundo (…) es extremadamente desafiante”, con conflictos como la guerra en Ucrania o la ofensiva militar de Israel en la Franja de Gaza. Aun así, “esto no disminuye la absoluta urgencia, la absoluta necesidad de abordar el cambio climático”, subrayó el político neerlandés en la última jornada de su visita de dos días a Kenia para preparar la COP28, que se celebrará en Dubái del 30 de noviembre al 12 de diciembre próximos.
El comisario abogó por “reducir drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero de todos los emisores, y especialmente de los principales emisores: los veinte países del G20 (grupo de economías desarrollas y emergentes) en conjunto son responsables del 80% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero”.
“Si avanzamos lo suficiente en la mitigación, el Fondo para Pérdidas y Daños podrá lanzarse en Dubái, con las primeras promesas también”, aseguró. El comisario se refirió al histórico fondo aprobado en la última Cumbre de la ONU para el Cambio Climático, la COP27 celebrada en Egipto en 2022, que debe cubrir el coste del impacto de la crisis climática en los países pobres, pero que aún no se ha puesto en marcha.