Desde octubre de 2015 y hasta finales del pasado mes de agosto se habían comercializado 1.261.800 toneladas de aceite de oliva. Ese volumen supone un 2,5% más que en los primeros once meses de la campaña anterior, de acuerdo con los últimos datos de la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA).
Tanto las exportaciones como las ventas en el mercado interior han contribuido al incremento, creciendo en ese mismo porcentaje. Los envíos al exterior sumaban hasta finales de agosto un total de 790.300 toneladas. Por su parte, la comercialización en el mercado nacional ascendía a 471.500 toneladas.
Las existencias a finales de agosto, a falta de un mes para el cierre oficial de la campaña, eran de 429.000 toneladas. Es una cifra suficiente para cubrir la demanda hasta que haya aceite disponible de la nueva campaña.
Hay que recordar que la producción se ha situado este año en 1.321.000 toneladas. Por su parte, las importaciones hasta agosto sumaban algo más de 100.000 toneladas.