El Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (ITACyL), dentro del Plan de Impulso a la Bieconomía Agroalimentaria de la Consejería de Agricultura y Ganadería, está llevando a cabo distintos proyectos de investigación junto a la Universidad de León (ULE) y los productores de la SAT Lúpulos de León y Hopsteiner para impulsar medidas que afiancen la competitividad del lúpulo en la provincia de León.
Están dirigidas a mejorar la calidad y eficiencia de cultivo del lúpulo en León y a la obtención de bioproductos de alto valor a partir de sus compuestos y deshechos vegetales.
Los primeros resultados de las investigaciones sobre la modernización y las perspectivas de este cultivo se presentaron esta semana en una jornada celebrada en el Centro de Biocombustibles y Bioproductos de Veguellina de Órbigo (León).
Líneas de investigación
Según ha informado la ITACyL, una de las líneas de investigación está relacionada con la adaptación del cultivo del lúpulo al cambio climático. El objetivo principal es buscar sistemas de riego más eficientes y sostenibles con menor coste e impacto ambiental.
Este planteamiento persigue una reducción del 70% del consumo de agua así como ahorro de la energía para riego utilizando bombas más pequeñas y eficientes y riegos mucho más controlados.
Además, estos sistemas permiten reducir drásticamente las enfermedades como oidio y mildiu al reducir la humedad ambiental y ser más eficientes en el consumo de fertilizantes, permitiendo la fertirrigación.
Otra de las líneas de investigación se centra en la experimentación con nuevas variedades como oportunidad de diversificación agronómica y de mercado, atendiendo a la actual demanda global del mercado de producir cervezas más aromáticas y singulares basadas en diferentes lúpulos.
Con el objetivo de darle un mayor valor añadido al cultivo de lúpulo y a los residuos generados en su proceso, desde el Plan de Impulso a la Bioeconomía Agroalimentaria se han promovido los trabajos que se están llevando a cabo en el Centro de Bioproductos para el aprovechamiento de los compuestos del lúpulo.
Los resultados de este análisis de los distintos compuestos del lúpulo puede tener aplicaciones dentro de los sectores de la alimentación, la nutracéutica y la farmacia a través de alimentos funcionales, suplementos dietéticos, medicina herbal y tradicional, y naturopatía.
Por lo tanto, algunos de los compuestos presentes en el lúpulo o que se pueden extraer de sus residuos, como los alfa-ácidos, los beta-ácidos, los aceites esenciales, polifenoles, xhantohumol o las gamma-prenilnaringeninas tienen efectos antiinflamatorios, bactericidas, analgésicos, antioxidantes o incluso anticancerígenos.
Finalmente, otra de las líneas de trabajo busca el aprovechamiento del residuo de la planta del lúpulo, no solo como biomasa sino extrayendo del mismo compuestos linucelulósicos útiles para su aprovechamiento en la industria.