La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) considera que en la Ley de la Cadena Alimentaria no se define con precisión el concepto de “costes de producción”, lo que “puede provocar una mayor complejidad en los contratos y la utilización de índices comunes, favoreciendo el alineamiento de precios”.
La CNMC hace esta observación en un informe sobre el anteproyecto de modificación de la Ley de la Cadena Alimentaria dirigido a incorporar a esta norma la directiva comunitaria sobre prácticas comerciales desleales.
Respecto a estas últimas, subraya en un comunicado su lucha contra las mismas pero advierte “de que muchas prácticas comerciales no tienen per se un efecto neto negativo. Únicamente son perjudiciales ante situaciones de desequilibrio de poder negociador o falta de competencia”.
Por ello, “considera que una de las formas más efectivas de luchar contra las prácticas comerciales desleales es atacar los factores que favorecen la existencia de desequilibrios en el poder de negociación entre las partes, favoreciendo un mayor tamaño de los productores y la eliminación de las barreras a la apertura y funcionamiento de establecimientos de distribución alimentaria minorista”.