La consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, Milagros Marcos, ha defendido que el fin de las cuotas del sector de la remolacha, que se producirá el 1 de octubre, puede ser una oportunidad para las empresas fabricantes de azúcar y para los productores.
Tras el Consejo de Gobierno celebrado el jueves día 28, la consejera abordó este asunto y señaló que debe ser un punto de inflexión para que los agricultores de la Comunidad cultiven más raíz y la vendan a un precio estable.
Asimismo, subrayó que su departamento «lleva dos años trabajando para que el sector aproveche la oportunidad» y que en su opinión se presenta con este cambio normativo de la Unión Europea. Además, manifestó que en el presente ejercicio agrario Castilla y León tiene un incremento de superficie sembrada de remolacha del 14%.
Según Marcos, ya existe un acuerdo cerrado con las industrias que operan en la Comunidad (Azucarera y Acor) para que compren más remolacha mediante un contrato estable con los agricultores. Dicho acuerdo es hasta 2020, aunque están trabajando para ampliarlo a 2024.
Por último, la consejera afirmó que «nos hemos anticipado» al fin de las cuotas y se mostró convencida de que los productores de la Comunidad están en disposición de acaparar parte del millón de toneladas de azúcar que importa España anualmente.