César Lumbreras: Desplome de explotaciones de vacas, cabras y ovejas

Primeras protestas de los ganaderos por la importante caída de los precios de la leche de oveja

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Ganadería en Gama, Cantabria. Imagen de archivo de Laura Castillo

El número de ganaderos de vacuno, ovino y caprino de leche se ha desplomado en los últimos años; a pesar de ello la producción no ha bajado –con excepción de la correspondiente a la leche de cabra– lo que significa que el tamaño de las explotaciones ha aumentado. Estas son las conclusiones que se pueden extraer de los análisis de estos tres sectores. El más importante de todos ellos por volumen es el vacuno de aptitud láctea. De acuerdo con los últimos datos facilitados por el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), el pasado mes de noviembre declararon entregas de leche 9.349 ganaderos frente a los 9.424 de octubre y los 10.094 que había un año antes. En lo que respecta a la producción de leche de vaca en ese mes de 2024 se registró un ligero incremento del 0,8% respecto a 2023, por lo que el acumulado a lo largo de los once primeros meses del año pasado ascendió a 6,82 millones de toneladas, lo que supuso el 1,5% más que en el mismo periodo de 2023.

Mientras tanto, el precio medio ponderado de la leche de vaca en España se situó en 0,492 euros por litro en noviembre, lo que significó un ligero aumento en relación con los 0,486 euros por litro de octubre; respecto a noviembre de 2023 se registró una bajada del 5,75%, ya que entonces fue de 0,522 euros por litro.

En el caso del ovino, los datos reflejan también una disminución del número de ganaderos y un aumento de las entregas de leche. Según este organismo dependiente del Ministerio de Agricultura, los ganaderos bajaron el 8,55%, pasando de 2.468 en noviembre de 2023 a 2.257 el mismo mes del año pasado, manteniéndose así la tendencia a la baja del último quinquenio. En ese mismo periodo de un año, la producción subió el 1,24%, llegando a los 26,4 millones de litros.

En el capítulo de los precios hay que constatar una importante bajada del 16,88% entre los meses de noviembre de 2023 y 2024, situándose en 1,576 euros por litro frente a 1,896. Esto ha provocado un gran malestar entre los ganaderos, hasta el punto de que ya se han convocado algunas movilizaciones.

En concreto, desde la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) han llamado a concentrarse el próximo día 23 frente a las instalaciones de la empresa Entrepinares, en la provincia de Valladolid, para exigir contratos justos y precios ajustados teniendo en cuenta los costes de producción.

Mientras tanto, en el caso del caprino lácteo la situación es la siguiente: caída superior al 9% en el número de ganaderos en un año (de noviembre a noviembre); importante recorte de casi el 15% del precio en ese mismo periodo y, este caso, y contrariamente a lo sucedido en vacuno y ovino también ha habido una caída de la producción de casi el 5% en el global.

Esta situación en el sector lácteo contrasta con la que se vive en el cárnico, tanto de vacuno como de ovino, en los que se han alcanzado precios históricos a lo largo del año pasado. En el primero de los casos se debe a la caída que se ha registrado durante los últimos años en el número de vacas nodrizas, tanto en España como en el conjunto de la UE, lo que ha provocado una reducción de la cabaña de terneros y terneras y la caída consiguiente de los sacrificios y de la oferta de carne. Mientras tanto, la demanda se ha mantenido firme en el interior y se ha disparado en los países del norte de África, principalmente Argelia y Marruecos.

Estos mercados se han abastecido desde España mediante el famoso «barco», medio a través del que se envían animales vivos. Se espera que se mantenga esta situación por lo menos un par de meses más hasta que pase el ramadán.

Por otro lado, hay dificultades para encontrar animales jóvenes y reponer las explotaciones de engorde. Los precios volvieron a subir durante la semana pasada en las principales lonjas españolas. En lo que respecta al ovino de carne también se alcanzaron el año pasado niveles históricos en los precios. Ello se debió a la importante caída del censo de animales, que no ha dejado de bajar en los últimos años, y al tirón de las exportaciones, principalmente a los países del norte de África, ya que el consumo interno sigue sin funcionar. La semana pasada predominaron las repeticiones de precios.

Artículo de César Lumbreras publicado en La Razón el 20 de enero de 2025

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