La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha sostenido que el problema de la despoblación no es exclusivo de España sino de toda la Unión Europea, por lo que se ha propuesto llevarlo «al corazón de Europa» al tratarse de un reto «compartido».
En la apertura del acto monográfico convocado por el partido Popular en Zamora sobre el mundo rural y el reto demográfico, Sáenz de Santamaría ha incidido en la necesidad de que esta estrategia sea «cosa de todos», de todas las Administraciones, desde el ámbito local hasta las instituciones europeas, a las que ha demandado que las políticas demográficas se incluyan en el próximo marco presupuestario, tanto en la Política Agrícola Común como en los fondos de Cohesión.
La vicepresidenta ha argumentado que los habitantes del medio rural tienen «derecho a recibir los mismos servicios públicos en condiciones de igualdad» y ha destacado la apuesta del Gobierno para llevar la conexión a Internet por banda ancha hasta todos los pueblos del país.
Sáenz de Santamaría ha llamado a reducir la «brecha» que existe entre la vida en el medio urbano y el medio rural, aunque ha alertado de que los pequeños municipios tienen que comenzar a «vender más» la riqueza que atesoran porque, en el caso de Castilla y León «vas a cualquier pueblo y te encuentras una iglesia románica espectacular… y es la tónica general».
Por último, la vicepresidenta afirmó que otra de las claves es incorporar a la mujer a las oportunidades de las explotaciones agrarias: «las mujeres somos vida y traemos vida a los pueblos», ha resumido.