El Consejo de Ministros cerró este viernes, ocho de enero, el segundo ciclo de planificación hidrológica de todas las cuencas competencia del Estado al aprobar, mediante Real Decreto, los 12 planes hidrológicos de competencia estatal.
Se trata de los que afectan a las demarcaciones hidrográficas del Cantábrico Occidental, Cantábrico Oriental, Miño-Sil, Duero, Tajo, Guadiana, Guadalquivir, Segura, Júcar, Ebro, Ceuta y Melilla.
Estos planes contemplan unas inversiones de más de 17.500 millones de euros hasta 2021 y con su aprobación, España da cumplimiento a la Directiva Marco del Agua.
Asimismo, el Gobierno aprobó otros cuatro planes de competencia autonómica (Galicia Costa, Tinto-Odiel-Piedras, Guadalete-Barbate y Cuencas Mediterráneas Andaluzas).
Reacciones
Desde la Federación Nacional de Comunidades de Regantes, su presidente, Andrés del Campo, ha mostrado su satisfacción por esta aprobación y ha apuntado que les gustaría también tener un Plan Hidrológico Nacional.
Por su parte, el Fondo Mundial para la Naturaleza considera que no contribuyen a la conservación, a la protección ni a la mejora del medio ambiente.
Asimismo, han señalado que lo más preocupante es que no promocionan el uso racional y sostenible de los recursos hídricos.
Por otro lado, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha anunciado que recurrirá ante el Tribunal Supremo los planes hidrológicos del Tajo, Segura, Júcar y Guadiana por considerar que perjudican gravemente los intereses de la región en materia de agua.
Además, desde el Ejecutivo autonómico han criticado que la aprobación la realice un gobierno en funciones y que Castilla-La Mancha la haya conocido por la prensa.
La Unión de Pequeños Agricultores de la región también los recurrirá, según anunció ayer, y ha propuesto a las plataformas en defensa de estos ríos y a las comunidades de regantes que vayan unidos en sus recursos.
