El pleno del Parlamento Europeo ha votado hoy su posición sobre la nueva directiva de productos del tabaco, muy criticada por los cultivadores españoles.
Entre otras cosas, los eurodiputados se han pronunciado a favor de aumentar el tamaño de las advertencias sobre los riesgos que supone fumar para la salud. Esas advertencias deberían ocupar, según esta posición, el 65% de la superficie de las cajetillas (frente al 75% que proponía la Comisión Europea).
También consideran que deben prohibirse los cigarrillos con sabores (mentolados, fresa, etc.), aunque en el caso de los mentolados sugieren un período transitorio de cinco años para su eliminación total.
Una vez que el Parlamento Europeo se ha pronunciado sobre esta directiva pueden comenzar las negociaciones entre los eurodiputados y el Consejo de Ministros para acordar un texto definitivo.