En la última emisión de AGROPOPULAR -4 de abril- viajamos radiofónicamente hasta Cipérez, un pueblo de menos de 300 habitantes de la provincia de Salamanca, para hablar con su alcalde Francisco Alonso, quien explicó las medidas que han adoptado para afrontar la situación de emergencia sanitaria ocasionada por el COVID-19.
Según detalló, tienen una población muy mayor -ya que de 250 habitantes 167 tienen más de 60 años- y para evitar que salgan de sus casas han habilitado un número de teléfono de asistencia para que todas las personas puedan contactar con el médico y éste pueda desplazarse a su domicilio para hacerle la visita.
«En el caso de que necesitasen recetas también pueden contactar por teléfono con el médico, que las tramita al botiquín y se las hace llegar a las personas que lo necesiten y no quieran salir de casa», añadió el alcalde.
Otra de las actuaciones que llevan a cabo en este contexto de emergencia sanitaria es la de desinfectar diariamente. En concreto, el alguacil desinfecta todos los centros públicos así como las dos tiendas de comestibles que hay en el pueblo. Además, cada tres días vienen los bomberos del parque de Vitigudino, perteneciente a la Diputación de Salamanca. De hecho, fueron ese mismo sábado a desinfectar la fábrica de obleas, que al ser producto alimentario está abierta.
A su juicio, «dentro de las posibilidades que tenemos estamos poniendo todas las medidas habidas y por haber».
En cuanto a la situación de desempleo en el pueblo, Francisco Alonso explicó que de momento prácticamente no hay paro en Cipérez (si acaso hay dos personas desempleadas) ya que la fábrica sigue trabajando con normalidad.
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