Los eurodiputados de la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo (Comagri) se oponen a las propuestas de la Comisión Europea sobre la revisión de la directiva de emisiones industriales en lo que respecta a la ganadería. Hace unos días adoptaron (por 36 votos a favor, 8 en contra y 2 abstenciones) su opinión, en la que piden que las explotaciones bovinas queden fuera del ámbito de aplicación de la directiva y que se mantenga la situación actual para las de porcino y aves.
Esto significa que el texto seguiría aplicándose a las explotaciones de más de 40.000 plazas en el caso de las aves, de más de 2.000 en el de los cerdos de producción, de más de 750 en el caso de las cerdas y a partir de 750 unidades de ganado mayor (UGM) en las explotaciones mixtas.
El responsable del dossier en esta comisión parlamentaria, Benoît Lutgen (Luxemburgo, demócrata-cristiano) considera que “la ganadería no pinta nada en esta directiva”. Denuncia una propuesta “contraproducente”, que crea obligaciones administrativas y cargas adicionales, provocará una concentración del sector ganadero y dará una ventaja competitiva a las grandes empresas, que podrán cumplir con las nuevas obligaciones. Ello podría conducir incluso a una disminución drástica de la producción animal en la UE “en beneficio de nuestros competidores, cuyos sistemas de producción son menos exigentes”.
El comienzo de la batalla
Las organizaciones y cooperativas agrarias de la UE (COPA-COGECA) esperan que “el Parlamento Europeo tenga debidamente en cuenta el mensaje claro lanzado por los diputados de la Comagri en sus próximas votaciones”.
Para Benoît “esto no es más que el principio de la batalla”. El Parlamento Europeo todavía tiene que adoptar su posición en sesión plenaria (sobre la base del trabajo de la comisión parlamentaria de Medio Ambiente) y después se abrirán las negociaciones con los Estados miembros, que adoptaron la suya en marzo.
Hay que recordar que estos últimos dejan fuera del ámbito de aplicación de la directiva a la ganadería extensiva y elevan los umbrales a partir de los cuales se aplican las obligaciones de la misma a las explotaciones ganaderas (a 350 unidades de ganado mayor en el caso de las explotaciones de vacuno y porcino y a 280 unidades en las avícolas). El COPA-COGECA tampoco está de acuerdo con este planteamiento.