Los países de la Unión Europea pactaron este jueves -16 de marzo- su posición para negociar la revisión de la Directiva sobre Emisiones Industriales, que supondrá un refuerzo de las exigencias medioambientales en granjas porcinas y avícolas y, por primera vez, también de vacuno, pero deja fuera a la ganadería extensiva.
Los criterios para incluir a las explotaciones ganaderas en el ámbito de aplicación de la nueva directiva sobre emisiones industriales ha sido uno de los elementos que han bloqueado las discusiones entre los Estados miembros.
Exenciones a la Directiva
El compromiso de los ministros deja fuera del ámbito de aplicación de la directiva a las explotaciones extensivas de bovinos y cerdos.
Según el texto, estarán exentas las granjas basadas en pastos, con una densidad baja de efectivos y cuyos animales permanezcan en el exterior una gran parte del año.
Dimensiones de las explotaciones
También se llegó a un compromiso sobre las dimensiones de las explotaciones a las que se aplicará la directiva. Serán las que cuenten con más de 350 UGM (unidades de ganado mayor) en el caso de las granjas de vacuno y porcino y con más de 280 UGM en el caso de las avícolas.
Revisión de los umbrales
Los ministros de Medio Ambiente de la UE adoptaron una posición común sobre la propuesta de revisión de la directiva de emisiones industriales. La cuestión de los umbrales a partir de los cuales las explotaciones ganaderas se verán afectadas por la directiva ha centrado buena parte de los debates.
Algunos Estados miembros, como Italia o Bulgaria, no apoyaron el compromiso precisamente por los umbrales. Tras una reunión, el 10 de marzo, de los embajadores de los 27 ante la UE (COREPER), la presidencia sueca del Consejo consideró que el proyecto de compromiso que había puesto sobre la mesa constituía un buen equilibrio. Y fue ese texto el que se sometió a la aprobación de los ministros.
Con respecto a la primera versión presentada unos días antes, los umbrales se han vuelto a revisar al alza. Para las explotaciones de vacuno y porcino se han elevado a 350 UGM, para las de aves a 280 UGM y para las mixtas a 350 UGM. La propuesta de compromiso inicial los situaba en 300, 250 y 300 UGM, respectivamente.
Tras un primer debate, y a pesar del apoyo de una mayoría de delegaciones, la presidencia se tomó algunas horas para convencer a los Estados miembros más reticentes. Francia, con el fin de favorecer el compromiso, apoyó el texto a pesar de que los umbrales estaban aún por debajo de los que pedía (450 UGM).
Se ha acordado un período transitorio de hasta 6 años para que los ganaderos afectados puedan adaptarse
Por el contrario, otros países, como Dinamarca, querían que fueran más bajos. En su proyecto inicial la Comisión Europea fijaba un umbral de 150 UGM para todas las explotaciones.
Por último, se ha acordado un período transitorio de hasta 6 años para que los ganaderos afectados puedan adaptarse.
España, que tomará el relevo de Suecia en la presidencia del Consejo de la UE en el segundo semestre del año, espera cerrar las discusiones sobre esta disposición con el Parlamento Europeo, que todavía no ha adoptado su posición al respecto.