Las emisiones de gases de efecto invernadero de la agricultura aumentarán un 5 % en los próximos diez años. Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la la Organización de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la producción ganadera será la responsable del 62 % de ese incremento.
En su informe conjunto anual publicado este martes, la OCDE y la FAO destacan que ese incremento de las emisiones será menor que el de la producción agrícola, que subirá a un ritmo del 1 % anual.
La razón de esa menor progresión de los gases causantes del calentamiento climático se explica porque la expansión de la producción se conseguirá sobre todo con mejoras de productividad y sólo marginalmente por una ocupación de mayores superficies.
Sin embargo, la ganadería reforzará su peso como principal causante del calentamiento dentro del sector primario, seguido del uso de los fertilizantes, que en el próximo decenio supondrán un 34 % de las emisiones adicionales de gases de efecto invernadero.
La agricultura, las actividades forestales y otros usos de la tierra representan en torno al 22 % de todas las emisiones de efecto invernadero
Los autores del estudio precisan que sólo han tenido en cuenta las emisiones de óxido de nitrógeno generadas durante el proceso de fertilización, ya que si además se añadieran las provocadas durante la fabricación de esos fertilizantes, el efecto suplementario sería de alrededor del 70 %.
La agricultura, las actividades forestales y otros usos de la tierra representan en torno al 22 % de todas las emisiones de efecto invernadero. La mitad proceden del metano y el óxido de nitrógeno, causados por las explotaciones agrícolas y ganaderas, y la otra mitad de emisiones indirectas de dióxido de carbono (CO2) derivadas del uso de la tierra.
El grueso de ese aumento de emisiones que se producirá de aquí a 2033 y tendrá lugar en países de ingresos medios y bajos, mientras que la región formada por Europa y Asia central será la única en la que se anticipa una disminución debido a una reducción del peso de los animales rumiantes, que producen metano en su proceso digestivo.
Según el texto, en términos relativos, el alza será especialmente fuerte en el África subsahariana (del 0,9 % anual) pero hay que tener en cuenta que el punto de partida en esta zona es relativamente bajo, ya que sólo supone el 16 % de las emisiones de gases de efecto invernadero por la agricultura.