Ahora que Donald Trump ha tomado posesión de su cargo como presidente de Estados Unidos, con sus amenazas generalizadas sobre aplicación de aranceles a los productos llegados del exterior, conviene recordar cuál es la relación comercial de España con este país en el ámbito agroalimentario. La balanza comercial es favorable a España; en los cuatro últimos años el superávit ha rebasado los 1.000 millones de euros, con excepción de 2023 en el que se redujo a poco más de 900 millones. En 2024 y a falta de conocer los datos del pasado mes de diciembre, el año se ha cerrado con un incremento de ese saldo positivo.
Los datos extraídos de la base de datos del Ministerio de Agricultura muestran que el valor de las exportaciones españolas de productos agroalimentarios a Estados Unidos en los once primeros meses de 2024 alcanzó los 3.319,21 millones de euros, una cifra que supera a la de años previos. El aceite de oliva y el vino son los productos más exportados desde España a ese país. También son significativas las ventas de quesos, carne de porcino y despojos comestibles.
Por su parte, las importaciones en España de productos agroalimentarios procedentes de Estados Unidos sumaron un valor de 1.761,06 millones de euros en ese período. La lista está encabezada, en este caso, por las habas de soja, los frutos secos y el maíz, aunque también es significativo el valor de las importaciones de leguminosas grano, aceite de soja y tortas de soja.
