España es ya un destino importante para las legumbres de Estados Unidos. Sin embargo, en la actual campaña 2017/18 presenta aún más oportunidades para sus operadores, dada la disminución de la cosecha debido a la sequía.
Según un informe del Departamento de Agricultura de ese país (USDA), esas oportunidades se dan principalmente en el caso de las lentejas, cuya producción en España ha caído cerca del 40% a pesar del incremento de la superficie dedicada a este cultivo. De acuerdo con las estimaciones del Ministerio de Agricultura, que el USDA recoge en su informe, la producción se situaría en esta campaña en 18.300 toneladas, frente a las 29.300 de la pasada.
En el caso de los garbanzos la disminución de los rendimientos ha sido también acusada, pero la producción será solo ligeramente inferior a la de la campaña pasada porque ha aumentado la superficie. Se estima en 38.600 toneladas (38.900 en 2016/17). La producción de judías, por el contrario, será más elevada que en 2016/17 (19.500 toneladas frente a 17.600); este cultivo es el único de los tres en los que predomina el regadío y no se ha visto afectado por la falta de precipitaciones, subraya el informe.
El USDA recuerda que, a pesar de que las legumbres son un alimento importante de la dieta mediterránea, son un cultivo menor en España y la producción nacional está lejos de cubrir la demanda, que ronda las 140.000 toneladas. En consecuencia, España es importadora neta de lentejas, garbanzos y judías y Estados Unidos es uno de nuestros principales abastecedores. En la campaña 2016/17 importamos 57.021 toneladas de lentejas (de las que 35.394 llegaron de Estados Unidos), 43.634 toneladas de garbanzos (18.222 de ese país) y 38.926 toneladas de judías (4.537 de Estados Unidos).