La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha elevado ligeramente la producción mundial de cereales en 2024/25 en octubre en 1,3 millones de toneladas más respecto al informe de septiembre, situándose en 2.852,7 millones de toneladas (incluido el arroz), debido a una revisión al alza de las producciones de arroz y trigo que contrarrestó la pequeña reducción de la producción mundial de cereales secundarios. A pesar de estas últimas revisiones, todavía se prevé que la producción mundial de cereales en 2024/25 descienda moderadamente por debajo del nivel de 2023/24.
Según la FAO, la producción mundial de trigo se ha fijado en 792,9 millones de toneladas en 2024/25, lo que representa un incremento del 0,2% con respecto al mes anterior y un 0,5% de aumento interanual. El incremento de este mes se debe, sobre todo, según indica la organización “a las mejores perspectivas para el trigo en Australia, donde las pautas de precipitación favorables en las zonas occidentales tras un comienzo seco de la campaña han reforzado las expectativas de rendimiento”. Esta revisión al alza compensa con creces el considerable recorte del pronóstico sobre la producción de trigo en la Unión Europea, “donde las condiciones meteorológicas excesivamente húmedas mermarán el rendimiento en un grado mucho mayor que el previsto anteriormente”, explica la FAO.
En cuanto a las perspectivas de producción mundial de cereales secundarios en 2024/25 se han reducido ligeramente este mes a 1.520,7 millones de toneladas, situándose en un 0,8% por debajo del nivel del año anterior. La reducción se debe principalmente al descenso de los pronósticos sobre la producción de maíz y cebada en la UE, donde las condiciones meteorológicas desfavorables han rebajado las perspectivas de rendimiento.
Sin embargo, el pronóstico relativo a la producción de maíz en Estados Unidos se ha incrementado “a raíz de las recientes evaluaciones sobre el terreno que apuntan a unos rendimientos mayores de lo previsto anteriormente, respaldados por unas condiciones meteorológicas casi ideales durante toda la campaña”, apunta la FAO.
Por último, en lo que respecta al arroz, los pronósticos de producción se han reducido en varios países desde septiembre, especialmente en Myanmar, “donde los problemas de inundaciones recurrentes, entre ellos los producidos por el tifón Yagi, han exacerbado las perturbaciones causadas por la intensificación del conflicto, la escasez de mano de obra y el incremento de los costos de producción”. Sin embargo, las revisiones a la baja para estos países quedaron compensadas en gran medida por las perspectivas más optimistas para la India.
En consecuencia, las previsiones actuales apuntan a que la producción mundial de arroz en la campaña 2024/25 alcanzará un máximo histórico de 539,2 millones de toneladas (arroz elaborado), cifra que supera en un 0,9% la estimación revisada para 2023/24 y 2,2 millones de toneladas más a las previstas en septiembre.
