Aunque los precios de los abonos mantienen niveles históricamente altos, el comisario de Agricultura, Janusz Wojciechowski, señaló ante el pleno del Parlamento Europeo que no habrá nuevas medidas a corto plazo para garantizar la disponibilidad de fertilizantes. Para el largo plazo habló del uso de abonos orgánicos y de la gestión de la salud de los suelos.
En una sesión de preguntas y respuestas ante el pleno del Parlamento Europeo, en Estrasburgo, el comisario de agricultura declaró que «tras nuestra Comunicación de noviembre, dirigida a garantizar la disponibilidad continua de abonos, hay una serie de medidas que o bien están ya en curso o se pondrán en marcha pronto o bien están a disposición de los Estados miembros para su aplicación. Por ello, la Comisión no tiene previsto adoptar medidas adicionales por el momento».
En esta sesión, el Parlamento adoptó a mano alzada una resolución en la que pide a Bruselas que garantice el suministro de abonos y actúe para hacer bajar los precios y para aumentar la autonomía estratégica de la UE.
El comisario indicó que solo cuatro Estados miembros han recurrido al marco temporal de crisis para las ayudas de Estado para hacer frente a la volatibilidad del mercado de los abonos: «han gastado poco más de 917 millones de euros (…) en regímenes específicos para la compra de abonos».
Se trata de «Polonia, con un presupuesto de 836 millones de euros; Grecia, con 60 millones; Eslovenia, con 15 millones y Malta con 6,5 millones de euros». Añadió que España ha decidido también apoyar a sus agricultores «con una partida de 300 millones de euros en ayudas de Estado debido a la subida del coste de los abonos».
Wojciechowski recordó asimismo a los eurodiputados que el Consejo aprobó en diciembre de 2022 la decisión de suspender hasta el 17 de junio de 2023 los derechos de aduana aplicados al amoníaco y la urea (comprendidos entre el 5,5% y el 6,5%) procedentes de todos los países terceros, excepto Rusia y Bielorrusia. Además, confirmó que, de acuerdo con la Comunicación, en 2023 se pondrá en marcha el observatorio del mercado de los abonos, con el fin de intercambiar datos más precisos sobre la producción, el uso, los precios y el comercio.
Desarrollo de fertilizantes orgánicos
Los parlamentarios manifestaron sus preocupaciones por la dependencia de la UE de los abonos minerales. Wojciechowski subrayó a este respecto «la necesidad de desarrollar rápidamente un mercado para los abonos a base de hidrógeno descarbonizado, tales como el amoníaco verde y los abonos orgánicos reciclados a partir de residuos».
Según el comisario, esa opción reducirá la dependencia de la industria europea de los abonos «de las importaciones de combustibles fósiles y aumentará la seguridad del suministro, respetando los objetivos climáticos de la UE».
Por otro lado, reconoció que la autosuficiencia en este sector exige una mayor eficacia en el consumo de abonos. Con ese fin, el comisario de Agricultura subrayó que «los 28 planes estratégicos de la PAC contemplan 122 intervenciones dirigidas a mejorar la gestión de los nutrientes: 58 eco-regímenes (y sub-regímenes) y 64 compromisos agroambientales climáticos».
Salud de los suelos y gestión de los abonos
Para mejorar la fertilidad de los suelos y la gestión de los abonos, los eurodiputados pidieron que se pongan a disposición de los agricultores el asesoramiento y los instrumentos adecuados. A este respecto, Janusz Wojciechowski indicó que, «en el marco de la nueva PAC habrá una expansión de los servicios de asesoramiento agrícola, con indicadores concretos para evaluar el número de agricultores que se benefician de estas formaciones».
Añadió que «los servicios de la Comisión utilizarán estos indicadores para controlar cómo ponen en marcha los Estados miembros sus servicios de asesoramiento». Paralelamente, Bruselas, en colaboración con los 27, supervisará la aplicación del instrumento de desarrollo sostenible de las explotaciones agrícolas (FaST), una nueva herramienta digital para un uso más razonable de los abonos.