A partir del 1 de octubre Francia comenzará una nueva campaña de vacunación contra la gripe aviar que supondrá previsiblemente un coste de unos 100 millones de euros. El Gobierno francés lo ha decidido tras la detección la semana pasada del primer foco en una granja desde el mes de enero.
El ministro de Agricultura, Marc Fesneau, precisó que el Estado asumirá en torno al 70 % del costo, mientras que el año pasado pagó el 80 %. En cualquier caso, para las arcas públicas supondrá un gasto similar a los 100 millones de euros del pasado año.
Fesneau insistió en que «es un trabajo a largo plazo» porque primero fue necesario desarrollar una vacuna y después obtener la autorización de la Unión Europea para aplicarla.
Francia fue el primer gran país exportador de aves que se embarcó en la vacunación contra la gripe aviar, después del fuerte varapalo que sufrió por la epidemia en 2021-2022, que condujo al sacrificio de 20 millones de animales. El número de casos se redujo después radicalmente y en 2023 se registró tan solo una decena.
El primer foco en una granja en casi siete meses se localizó el pasado día 12 de agosto en una explotación del departamento de Ile et Vilaine, en Bretaña (noroeste).
Casos de lengua azul en Francia
Sobre la lengua azul, Fesneau recordó que han aparecido en Francia casos de un nuevo serotipo, más virulento, que se había detectado en Europa, en primer lugar, en Países Bajos.
El 5 de agosto se confirmó el primer foco de ese nuevo serotipo en Francia en el departamento de Norte, fronterizo con Bélgica y, según su departamento, a fecha del 14 de agosto se llevaban contabilizados 41 en seis departamentos del norte (Aisne, Ardenas, Marne, Moselle, Norte y Oise).
Por último, el ministro aseguró que Francia ha encargado 5,3 millones de dosis para bovinos y 1,1 millones para ovinos que se están distribuyendo por una amplia zona que cubre el norte y el noreste.
