Los servicios veterinarios de Estados Unidos han decidido suspender la importación de carne fresca, carne congelada y otros productos del porcino procedentes de Polonia hasta que complete la revisión de los protocolos de exportación de ese país, que han cambiado por la presencia de focos de peste porcina africana.
Debido a la enfermedad, solo las empresas situadas en ciertas zonas de Polonia tienen autorización para exportar porcino a Estados Unidos.
Según los servicios veterinarios americanos, en un control rutinario se habría detectado que una empresa no ha cumplido con los requisitos establecidos para prevenir la propagación del virus y también se está investigando a una segunda empresa. A la vista de ello ha decidido llevar a cabo una investigación del protocolo polaco de exportación.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) está trabajando también con las autoridades de aduanas para que el personal controle el equipaje de pasajeros procedentes de Polonia con el fin de asegurarse de que no introducen productos sometidos a restricciones en el país.
La producción mundial de carne de porcino crecerá a pesar de la presencia de la peste en China
La producción mundial de carne de porcino podría crecer de nuevo un 1% en 2019, hasta los 114,5 millones de toneladas (equivalente en canal), frente a los 112,9 millones de toneladas previstos para el presente año, que ya suponen un incremento cercano al 2% respecto a 2017.
Un informe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) afirma que el incremento se deberá principalmente a la evolución al alza en China y en Estados Unidos. El crecimiento de la producción en China será más moderado que el previsto para el presente año debido a la reciente aparición de la peste porcina africana en este país.
Según el informe, la presencia de la enfermedad en China está teniendo impacto en el movimiento de animales y en los precios y está frenando la expansión del sector que se venía registrando en este país, que no solo es el primer productor mundial de carne de porcino, sino también el principal consumidor e importador.
El USDA constata que hasta el pasado 10 de octubre se habían registrado 31 focos en ocho provincias, en las que se concentra algo más del 50% de la cabaña. El alcance real de la epidemia y su potencial propagación son una incógnita. Sin embargo, las restricciones al transporte y la comercialización en las provincias afectadas y en las limítrofes han roto las cadenas de abastecimiento y ello hace que los precios difieran de unos puntos a otros del país.
La incertidumbre y una posible caída de los precios del porcino debido a los focos de peste porcina africana ralentizarán el crecimiento de la producción y podrían incrementar las importaciones del país en 2019.
Según los datos del USDA, China pasaría de 53,4 millones de toneladas en 2017 a 54,15 millones en 2018 y a 54,8 millones en 2019. A pesar del crecimiento es una producción todavía inferior a su consumo, que también va en aumento y que podría alcanzar los 55,7 millones de toneladas este año y los 56,5 millones el próximo.
