El gasto alimentario total de los hogares españoles alcanzó los 67.490,78 millones de euros en 2017, lo que supone un ligero aumento del 0,6% respecto a 2016. El incremento se debió a la subida de los precios del conjunto de los alimentos en un 1,3%, ya que en volumen se registró una caída del 0,7%.
Son datos del Informe del Consumo de Alimentación en España 2017, que acaba de publicar el Ministerio de Agricultura, en el que destaca la importancia en la cesta de la compra de productos como las frutas, las hortalizas y las patatas frescas, la leche y los derivados lácteos y la carne. Si se comparan las cifras de 2017 con las del año anterior se observa una disminución en el consumo, en volumen, de la mayoría de los productos; sin embargo, si se considera el valor de los productos se constatan subidas en algunos de ellos (como la carne, el pescado o los aceites) por la subida de los precios.
En cuanto a las bebidas, los datos muestran un aumento en el consumo de agua envasada y las cervezas y un descenso en el caso de las bebidas refrescantes, los zumos y néctares, las bebidas espirituosas y los vinos con DOP/IGP.
Respecto a la evolución del gasto alimentario dependiendo del tipo de hogares, el informe muestra un aumento del realizado por las parejas con hijos de edad mediana y por las parejas sin hijos. Se mantuvo estable en el caso de los jubilados y las parejas con hijos pequeños y disminuyó en las demás categorías, aunque hay que apuntar que, por lo general, también disminuyó la población de esas otras categorías.
Un tercio del gasto fuera del hogar
Según el informe del Ministerio, algo más de un tercio del gasto alimentario de 2017 se realizó fuera del hogar. Ascendió, en concreto, a 35.094 millones de euros, lo que equivale a 3.896,6 millones de kg.-litros y cerca de 8.327,5 millones de consumiciones.
Menos desperdicio
El informe da cuenta asimismo de la evolución del desperdicio alimentario, que disminuyó en un 5,7% en 2017 respecto al año anterior. Aun así, los hogares españoles tiraron a la basura 1.229 millones de kilos de alimentos, lo que supone 23,6 millones de kilos semanales.
El 87,5% del total de alimentos tirados a la basura se corresponde con productos desperdiciados por los hogares tal cual los compraron. En volumen, los alimentos más desechados son frutas, verduras y pan. Un 12,5% del desperdicio corresponde a los restos de platos cocinados en el hogar.
La presentación del informe puede descargarse aquí.
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