La Agencia de Seguridad y Emergencias ha retirado más de 1.400 animales muertos como consecuencia de la gota fría en la comarca alicantina de la Vega Baja. La mayoría de las reses pertenecían a granjas avícolas y otras explotaciones de ganado ovino y porcino, según la consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo.
El Gobierno regional ha anunciado que se mantendrá el dispositivo de casi un centenar de efectivos en Dolores, San Fulgencio y Daya Vieja hasta recuperar la total normalidad.
El dispositivo especial se mantendrá hasta el próximo lunes -30 de septiembre-
La Generalitat valenciana ha informado de que una dotación de 45 bomberos forestales con dos autobombas, 8 veterinarios, dos camiones de Tragsa y 42 personas voluntarias de Protección Civil con formación especializada en estas situaciones trabajan en los términos de Dolores, Almoradí, San Fulgencio y Daya Vieja achicando agua de los campos inundados.
La consellera ha asegurado que el dispositivo especial se mantendrá hasta el próximo lunes -30 de septiembre- cuando se volverá a reunir el Centro de Coordinación Municipal de Emergencias de Dolores (Cecopal) «donde se decidirá si se ha vuelto a la total normalidad y, entonces, se retirarán los efectivos desplegados por la Conselleria de Justicia e Interior».
Bravo ha explicado que técnicos de la Agencia Valenciana de Seguridad y Emergencias están vigilando con drones los niveles del agua que aún no ha sido drenada para asegurarse de que no provoca más daños. Además, se están controlando los niveles de materia orgánica en las balsas para que no haya problemas de salubridad que pudieran provocar enfermedades.
Finalmente, Bravo ha destacado que era «necesario» que los ayuntamientos afectados por la gota fría «contaran con el apoyo decidido de los servicios de emergencia de la Generalitat en los días posteriores para recuperar la normalidad y, en especial, para evitar problemas sanitarios».