La semana pasada se registraron varias tormentas de granizo en distintos puntos de la Península que han ocasionado daños importantes en los cultivos.
En Castilla-La Mancha, se han visto afectadas diversas explotaciones vitícolas de Toledo.
Todo apunta a que, por culpa de la tormenta de granizo que cayó el domingo anterior , mermarán las buenas expectativas de producción que había en la zona de cara a la vendimia.
Los municipios más afectados han sido Madridejos y Consuegra.
En Lérida, la piedra cayó el martes y destrozó viñas, frutales, olivos y maizales, sobre todo, en los municipios de Arbeca y Puigrós.
Por último, la tormenta de granizo que cayó, también el martes pasado, en la comarca aragonesa del Bajo Cinca, en Huesca, afectó a una zona de 1.300 hectáreas de frutales y causó destrozos en las cosechas de nectarina, paraguayo y platerina.
Por otro lado, el Consejo de Ministros aprobó el viernes destinar 12,8 millones de euros para paliar los daños provocados por las intensas lluvias de marzo y abril en cinco cuencas hidrográficas