El valor de los intercambios agroalimentarios de la Unión Europea creció de forma significativa en 2022 con respecto al año anterior debido, en buena medida, a la subida sin precedentes de los precios de muchos productos, según el último informe sobre comercio exterior de la Comisión Europea.
Respecto a los volúmenes, el documento subraya que la subida de los precios no dio lugar, en general, a una caída de las cantidades comercializadas; incluso aumentaron las de ciertos productos. En lo que respecta a los socios comerciales de la UE, los datos muestran una disminución de las exportaciones a China y un fuerte aumento de las importaciones procedentes de Ucrania.
Las exportaciones agroalimentarias comunitarias crecieron el año pasado un 16%
Las exportaciones agroalimentarias comunitarias crecieron el año pasado un 16% respecto al anterior, hasta los 229.810 millones de euros. Aunque las principales partidas son las de preparados a base de cereales, los productos lácteos y el vino, Bruselas destaca el importante aumento de las ventas al exterior de cereales (+41% respecto a 2021) y subraya el incremento de los envíos de trigo a países en desarrollo. Los destinos más importantes fueron Argelia (4,9 millones de toneladas), Marruecos (4,1 millones), Egipto (2,9 millones) y Nigeria (2,5 millones).
La carne de porcino siguió siendo el año pasado el producto cárnico más exportado, a pesar de la disminución respecto al año anterior por la caída de la demanda por parte de China (-40%). Precisamente las ventas de productos agroalimentarios comunitarios a este país cayeron en un 8%, aunque se mantuvo como tercer cliente de la Unión.
El valor de las importaciones creció el 32%
El valor de las importaciones, por su parte, creció el 32%, hasta los 171.768 millones de euros, debido asimismo a la subida de los precios de buena parte de los productos importados, en particular de semillas oleaginosas y sus productos derivados. Bruselas recuerda que a la subida de los precios mundiales por la guerra se sumaron unas necesidades mayores de importaciones de semillas de girasol y habas de soja por la sequía del verano en la UE. Eso sucedió también con el maíz.
En cuanto al origen de los productos importados, Brasil se mantuvo en primera posición, con un incremento de sus envíos a la UE de casi un 50% y una cifra récord de más de 20.000 millones de euros. Aunque el crecimiento se debe principalmente a la subida de los precios, también aumentó de forma significativa el volumen importado de ciertos productos, como cereales, oleaginosas y proteaginosas. Le sigue el Reino Unido (que tras la caída registrada en 2021 recuperó casi los niveles de 2020) y, en tercera posición, Ucrania, que arrebató ese puesto a Estados Unidos.
El valor de las importaciones de productos ucranianos se disparó y casi duplicó el del año anterior. Las compras a ese país de cereales, oleaginosas y proteaginosas fueron las que más crecieron, tanto en volumen como en valor, sobre todo las de maíz, trigo y girasol.
Los intercambios con Rusia se redujeron el año pasado debido a la guerra
Los intercambios con Rusia se redujeron el año pasado debido a la guerra. Las exportaciones comunitarias a ese mercado cayeron en un 4%. En cuanto a las importaciones, Rusia no aparece en el informe de la Comisión Europea, que recoge datos solo de los 15 proveedores principales. En 2021 el valor de las importaciones de productos rusos en la UE fue de 2.173 millones de euros.
La balanza agroalimentaria comunitaria arrojó el año pasado un saldo positivo de 58.041 millones de euros, 10.000 millones menos que en 2021 (68.019 millones de superávit).
