El presidente de la principal organización agraria francesa, la FNSEA (Federación Nacional de Sindicatos de Explotaciones Agrarias), acusó a los agricultores españoles de ser los responsables de la aparición de residuos de pesticidas, incluso de sustancias prohibidas, en muestras de diversos tipos de lechugas analizadas por una organización ecologista.
La organización ecologista tomó 31 muestras de diversos tipos de lechugas y escarolas adquiridas en varios supermercados franceses. De esas 31, sólo una procedía de España, otra de Italia y las 29 restantes de Francia.
A pesar de ello, el representante francés señaló que el problema es importado y acusó principalmente a los agricultores españoles diciendo incluso que hay un importante tráfico de pesticidas en la Península Ibérica y que los suelos están impregnados por años de utilización sin control.
La Unión de Pequeños Agricultores ha pedido explicaciones a la organización francesa por esas acusaciones.
