Las bodegas y las cooperativas de Castilla-La Mancha están colapsadas ante las grandes cantidades de uva que les están llegando.
La situación llega hasta tal punto que una de ellas, la cooperativa ‘El Progreso’ de Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real) ha tenido que cerrar sus puertas, durante dos días.
El responsable nacional de vino de COAG, Alejandro García Gasco, ha confirmado esta situación y ha apuntado, entre las causas, la gran cosecha de uva en esta campaña y la mecanización del viñedo.
Según ha explicado, con la reestructuración se ha ido mecanizando la recogida, lo que ha supuesto que se acelere el proceso notablemente.
Sin embargo, las bodegas no se han adaptado a estos cambios que se han producido en la recolección, por lo que, cuando hay una campaña abundante, no están preparadas para acoger la uva que les llega, según el responsable nacional de vino de COAG.
Desde Bodegas Félix Solís, su presidente ha afirmado que su intención es evitar el cierre indefinido de la bodega, a pesar de estar al borde del colapso. Han encontrado, de momento, una solución alquilando almacenes externos.
Sin embargo, han reconocido que Castilla-La Mancha se encuentra en una situación “verdaderamente complicada” y que no pueden garantizar que no se vean obligados a cerrar algún día las instalaciones.
Por otra parte, el responsable de la Sectorial del Vino de ASAJA, Pedro Alcolea, ha añadido que esta situación también es fruto de la entrada de uva procedente de otras Comunidades Autónomas.
Las Cooperativas Agroalimentarias han elevado las previsiones de producción en esta campaña hasta los 48 millones de hectolitros de vino y mosto. Así lo han puesto de manifiesto, durante la celebración del Consejo Sectorial del Vino.
En el encuentro han acordado también la puesta en marcha de un sistema solidario entre las bodegas y cooperativas para posibilitar la redistribución logística de la uva que no tenga cabida en Castilla-La Mancha.