«La cuenca del Segura es autosuficiente sin trasvases, utilizando sus propias aguas subterráneas y las aguas desaladas”. Lo explicó en AGROPOPULAR –emisión del 26 de agosto- Francisco Turrión Peláez, hidrogeólogo que colaboró en la elaboración del informe para Greenpeace ‘La trama del agua del Segura, diez años después‘.
A su juicio, el denominado `déficit de la Cuenca del Segura´, no es más que un “fraude contable”, en el que se han sacado del balance natural 500 hectómetros cúbicos anuales del agua subterránea que va al mar.
Recientes estudios de la Universidad Autónoma de Barcelona han cifrado la descarga subterránea submarina del Mediterráneo entre 1 vez y 15 veces la cantidad de agua de los ríos Júcar y Segura, es decir, “por debajo del Júcar y del Segura puede haber hasta 15 Júcar y Segura que están descargando directamente al mar”. La consecuencia de «ese déficit, que no es cierto», es que cuando los pequeños agricultores y pequeños empresarios piden una concesión de agua a la Confederación les dicen que “no pueden porque hay un déficit”, mientras “las grandes empresas agroexportadoras no dejan de aumentar superficie de regadío y crecer año tras año”.
Como ejemplo, explicó que en las islas Baleares, cuando se habla de la situación hídrica de Mallorca, solo se hace referencia a los acuíferos, a los embalses subterráneos, porque allí no tienen pantanos. Sin embargo, en la Península Ibérica solo se habla de los embalses superficiales para exponer la situación hídrica. Lo lógico es que se dieran los dos datos (los embalses superficiales y los subterráneos).
“Nos han hecho creer que el única agua que existe es la fluvial que baja por el río”
Los embalses subterráneos de la Península Ibérica fueron estudiados por varias entidades. Incluso el Libro Blanco del Agua de 2001 habla de unos 180.000 hectómetros de agua subterránea embalsada en los acuíferos.
En el caso de la Cuenca del Segura se calculó un volumen de agua embalsada de 100.000 hectómetros, es decir, cien veces más que la capacidad de los embalses superficiales. Pero este dato de los embalses subterráneos ha sido separado de la planificación hidrológica, no se ha contabilizado, según Turrión. “Se ha sido quitado, a pesar de que la instrucción de planificación obliga a incluir como recursos naturales los almacenamientos subterráneos”. “Nos han hecho creer que el única agua que existe es la fluvial que baja por el río»
A su juicio, sería bueno que este informe se discutiera en el Congreso de los Diputados, porque es un tema nacional. Además, aseguró que, a pesar de lo que cree la gente, quien informa de lo que llueve no es la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), sino el Centro de Experimentación de Obras Públicas del Ministerio de Fomento, algo que, en su opinión, contradice la instrucción de planificación hidrológica. «Quien tiene que decir lo que llueve de media es la AEMET».
«Hay que poner estos cálculos encima de la mesa para que se vea dónde está la trampa«. En Murcia, para seguir regando como hasta ahora, con las aguas de los acuíferos subterráneos y las aguas desaladas pueden ser autosuficientes. Además, «tenemos que potenciar que los pequeños y medianos agricultores tengan acceso al agua».
Los beneficiarios de esta situación
Según el hidrogeólogo, hay tres beneficiarios de esta situación de estrés hídrico: el `lobby del hormigón´, que nos hace creer que necesitamos más embalses, más presas, más canales. En segundo lugar, los que ya tienen agua, porque así pueden producir y exportar sus productos mientras el resto no tiene nada. Por último, las empresas de agua municipales, en los sitios donde está privatizada, en las que «cuando nos dicen que nos suben el recibo un 10% lo vamos a ver normal porque hay poca».
Mientras tanto, según Turrión, en la ciudad de Murcia se está achicando agua de los garajes y de los sótanos constantemente para que no se inunden los coches. «Nos deshacemos del agua subterránea para que no nos inunde los coches y ese agua luego el Ayuntamiento la utiliza para regar jardines»
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