En los distintos programas de AGROPOPULAR hemos abordado la oposición de muchos sectores a la instalación de magrogranjas en distintos puntos de España. En la emisión de del 28 de diciembre, Luis José Martín, vocal encargado de Medio Ambiente de la Asociación Cultural La Alhóndiga, nos explicó el problema concreto que afecta a su zona.
En La Moraña abulense la empresa Nilasa ha solicidato ampliar su explotación de 2.000 a 7.200 cabezas de cerdo de cebo. En concreto, pretende hacer una ampliación en el municipio de Espinosa de los Caballeros, cuya parcela linda con Arévalo.
Según Martín, lo más preocupante es que la parcela se encuentra situada a 275 metros de la captación de agua potable de la población de Arévalo y de otras trece localidades más, que proporciona agua potable a unos 10.500 habitantes (en épocas estivales a unas 2.000 personas más). El temor de la Asociación es que produzcan filtraciones.
Se trata de la cuarta fase de la explotación en el término de Espinosa. Según Martín, no se sabe exactamente los cerdos que hay en esa fase, pero podrían rondar los 29.000, a lo que se sumaría la explotación de Gutierre-Muñoz, que está muy cerca.
Presentarán alegaciones
El Ayuntamiento de Arévalo ya ha anunciado que va a presentar alegaciones y la Asociación también porque hay mucha preocupación por el tema de las filtraciones, la contaminación de aguas y los olores.
La provincia de Segovia y la comarca limítrofe con La Moraña está considerada como zona vulnerable, de modo que, según Martín, «es como si estuvieran exportando lo que ya pasaba en Segovia a la provincia de Ávila».
Finalmente, subrayó que la granja se encuentra a 73 metros de la ladera del río Adaja y si hay un escape, como ha sucedido en otras ocasiones, puede llegar al río y de ahí a la captación que se encuentra a pocos metros. El periodo de alegaciones finaliza el 16 de enero.
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