La Unió de Pagesos (UP) de Mallorca ha reclamado una serie de actuaciones urgentes para hacer frente a la muerte de gran parte de plantaciones de almendros y otros frutales, como consecuencia de la Xylella fastidiosa o las sequías extremas que han sufridos las islas en los últimos años, entre otros factores.
En primer lugar, reclama que se reconozca la magnitud del problema y la valoración de los males y la afectación. También solicita la constitución de una comisión técnica para abordar este asunto y establecer una línea directa de asesoramiento a los agricultores.
Asimismo, ha planteado la elaboración de un plan de recuperación del arbolado y prever la repoblación de las plantaciones; así como la necesidad de elaborar un plan de investigación sobre las variedades, adaptación, resistencias, tratamientos, etc, y estudiar los posibles riesgos.
La organización ha subrayado que la aparición de distintas enfermedades, la presencia de la Xylella, las sequías y, en general, el impacto del cambio climático, “probablemente han convergido” hacia la situación en la que nos encontramos actualmente, con “riesgo de pérdida de la mayor parte del arbolado de cultivo de Mallorca”.
El sindicato ha recordado que entre los años 2007 y 2008 empezaron a observar que moría un número importante de almendros, sobre todo en la zona de Llevant. Tras los seguimientos llevado a acabo por Sanidad Vegetal en los años siguientes, se determinó que el mal estado de los almendros se debía a enfermedades causadas por hongos de la madera.
Según la Unió de Pagesos, en los últimos años, el mal estado de las plantaciones se ha agravado porque la “mortandad de árboles, que ahora es espectacular en el caso de los almendros, también incluye las higueras y otros frutales”.