La producción de mandarinas y naranjas podría caer un 27% esta campaña en la Comunidad Valenciana, según las primeras estimaciones de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA).
En consecuencia, según la organización, muchos operadores comerciales están mostrando un interés ligeramente superior al habitual por cerrar operaciones de compraventa con los citricultores, lo que se traduce en estos momentos en un adelanto de las compras y en un aumento generalizado de los precios (que en algunos casos alcanza el 17%). Lo que más se demandan son variedades tardías de naranjas, según AVA.
Con datos de la Lonja de Valencia, las organización calcula que las cotizaciones se han incrementado respecto al año pasado un 17,5% en el caso de la naranja Navelina, y el 10,7% en Clemenules. También ha constatado alzas en variedades de mandarinas como la Okitsu (+14%), Owari (+10,2%), Marisol (+8,8%) o Loretina-Mioro (+6%).
La naranja Navel es una de las más demandadas; algunos comercios se han visto en la necesidad de adelantar las compras de este producto para asegurarse un volumen con el que poder servir a la gran distribución europea (con un precio máximo por kilo de 0,294 euros); lo mismo sucede con la Navel lane late (máximo a 0,306 €/Kg) y la Clemenvilla (máximo 0,306 €/Kg).
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, ha señalado que “es lógico que si se prevé menos producción la campaña haya empezado animada y con un alza en los precios en campo”.
No obstante, ha precisado que “todavía es pronto” y “aunque las cotizaciones acaben siendo superiores, en muchos casos no van a compensar el descenso general de ingresos que sufrirán los productores valencianos en su conjunto a causa de esta disminución de la cosecha”.