La Comisión Europea ha asegurado que no se ha llegado a ningún acuerdo con Sudáfrica para aceptar los envíos de naranjas procedentes de ese país que no cumplan con las nuevas medidas de la Unión. Estas medidas, vigentes desde el 14 de julio, obligan a aplicar un tratamiento de frío a las naranjas para mitigar el riesgo de propagación de la plaga de la falsa polilla. De esta forma respondía Bruselas a una pregunta planteada por la eurodiputada española Mazaly Aguilar (del grupo de Conservadores y Reformistas Europeos).
Mazaly Aguilar expuso en la última emisión de Agropopular -10 de septiembre- su disconformidad con la respuesta de Bruselas y ha pedido que esta cuestión vaya en el orden del día de la reunión de la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo del 29 de septiembre.
Mazaly indicó que no daba crédito y explicó que “es verdad que la Comisión Europea, a través de la Dirección General de Sanidad, nos ha contestado que no se ha llegado a ningún acuerdo con el Gobierno de Sudáfrica, pero lo cierto es que esos barcos con esos contenedores, dos mil y pico contenedores, han llegado a puertos europeos después del 14 de julio, que era el momento en el que esos cargamentos tendrían que haber salido de puerto sudafricano con el tratamiento en frio para evitar que llegaran con esa polilla”.
En este contexto, explica Mazaly, la explicación que da la Comisión es que “cómo eran tantos los barcos que llegaban y los cargamentos, para evitar el cuello de botella en los puertos europeos y como los Estados miembros son responsables en sus propios puertos de hacer ese tipo de control, se había llegado a una situación, o por lo menos una solución momentánea de poder hacer ese tratamiento en frio en esos puertos de llegada». Además, según Mazaly, la Comisión añade en su explicación que «Sudáfrica tendría que entender que esto era solamente una medida excepcional para evitar esos cuellos de botella y que por supuesto tendría que cumplir en el futuro esa normativa impuesta por la Unión Europea”.
Ante esta explicación de la Comisión, la eurodiputada indicó que “conociendo un poquito los puertos europeos, no hay infraestructura ni hay logística para que ese tratamiento en frio se haga en el puerto de llegada, por no hablar de que el precio y el coste de ese tratamiento en frio puede ser el doble que hacerlo en el puerto de salida”.
En este contexto, indicó que “no estoy nada cómoda ni nada tranquila con la respuesta que nos ha dado la Dirección General de Sanidad. He solicitado a la Comisión de Agricultura que en la próxima reunión, que tendrá lugar el 29 de septiembre, en el orden del día vaya este asunto”.
Por último, indicó que “me parece de una gravedad importante, sobre todo muy preocupante si es que va a ser así la laxitud con la que se va a tratar a las naranjas de Sudáfrica sin ese tratamiento en frío», que es la única oportunidad que hay de evitar que vuelvan a entrar las plagas en territorio europeo, y por supuesto, a territorio español”.