Los ministros de Agricultura de los 27 Estados miembros de la Unión Europea (UE) han firmado una declaración conjunta en la que piden a la Comisión Europea (CE) la aprobación urgente de medidas adicionales para el sector agrario, en el marco de la crisis provocada por el coronavirus, y una PAC fuerte de cara al futuro para garantizar la seguridad alimentaria en la Unión.
Señalan que ya hay subsectores muy afectados por esta crisis y que “el impacto a medio y largo plazo podría ser potencialmente severo y duradero para los agricultores y ganaderos europeos, para la industria alimentaria y para la economía rural”.
Entre las actuaciones de apoyo al sector en estos momentos reclaman ayudas al almacenamiento privado en los sectores más afectados por las perturbaciones del mercado y el impacto en los precios, así como una ayuda excepcional para los mismos en el marco de las disposiciones establecidas en el reglamento de la OCM única.
También piden que se haga una revisión y seguimiento continuos de todos los sectores para introducir nuevas medidas si es necesario.
Los ministros aprecian las medidas adoptadas hasta el momento por Bruselas
En relación con la gestión de la Política Agraria Común (PAC), consideran necesaria una mayor flexibilidad (aparte de las medidas ya adoptadas en este ámbito), por ejemplo, porcentajes de anticipo de las ayudas más altos de los autorizados y activación de medidas específicas dentro de los programas de desarrollo rural.
En su declaración, los ministros aprecian las medidas adoptadas hasta el momento por Bruselas y “enfatizan el rol vital de los agricultores y ganaderos y del sector agroalimentario en general, en el mantenimiento de la seguridad alimentaria y el suministro de alimentos en Europa durante esta crisis, el marco esencial proporcionado por la PAC a este respecto y la necesidad de una PAC fuerte en el futuro”.