Tras dos campañas de producciones muy cortas debido a la sequía, la mejora de la producción de aceite de oliva en 2024/25 permitirá también una recuperación de las cifras de consumo interno y de exportación, aunque sin llegar a los niveles de 2021/22.
Esa es, al menos, la previsión del Ministerio de Agricultura, que ha publicado un primer balance de la actual campaña 2024/25. En él recoge asimismo un incremento de las existencias finales de campaña, que se situarían en 256.000 toneladas.
En lo que respecta al consumo interno, la cifra se aproximaría al medio millón de toneladas mientras que las exportaciones se acercarían al millón de toneladas. Las importaciones se mantendrían en un nivel similar al de la campaña anterior, en torno a las 240.000 toneladas.
Ligera revisión de la producción
Hay que apuntar que el Ministerio ha retocado ligeramente al alza su previsión de producción de aceite de oliva de la actual campaña, frente al aforo presentado el pasado 4 de octubre (de 1.262.300 toneladas). La nueva cifra, de 1,289 millones de toneladas, supondría un aumento del 51% respecto a la obtenida en la campaña pasada y del 6% comparada con la media de las seis últimas.
La evolución al alza no es uniforme; mejoran el dato de la campaña anterior principalmente Andalucía, así como Castilla-La Mancha y Extremadura, principales productoras, pero disminuye la producción en el resto.