Dado que la reducción drástica de las emisiones de metano es una prioridad para que el aumento de las temperaturas por el calentamiento global se mantenga por debajo de los 1,5°C, el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) va a poner en marcha una nueva iniciativa para ayudar a los países en desarrollo a reducir las emisiones de metano procedentes de sus actividades agrícolas y sus sectores agropecuarios en pequeña escala.
El FIDA explica que el sector agropecuario genera en torno al 42% de las emisiones de metano, que principalmente proceden de la actividad ganadera por los procesos de fermentación entérica y el tratamiento del estiércol, los cultivos de arroz por anegamiento y la quema de residuos de este cereal.
El sector agropecuario genera en torno al 42% de las emisiones de metano, que principalmente proceden de la actividad ganadera
Aunque las emisiones de los productores en pequeña escala son muy inferiores a las del sector agropecuario en gran escala y las de las explotaciones industriales, los pequeños productores también pueden contribuir a su mitigación, indica.
“El metano permanece poco tiempo en la atmósfera, lo que implica que si se toman medidas ahora se puede reducir con rapidez el ritmo al que avanza el calentamiento global”, afirmó Juan Carlos Mendoza, director de la División de Medio Ambiente, Clima, Género e Inclusión Social del FIDA. Según Mendoza, es prioritario reducir las emisiones de metano.
“Estos fondos permitirán que los productores en pequeña escala dispongan del marco de políticas y el apoyo financiero adecuados para reducir las emisiones de metano y, al mismo tiempo, poder aumentar su producción de alimentos y sus ingresos”, afirmó Rick Duke, enviado especial adjunto de Estados Unidos para el Clima.
Los enfoques que introducen mejores piensos también favorecen la salud y la cría de animales
En el marco de la iniciativa del FIDA, se apoyará la preparación de un manual para ayudar a los países a incorporar sus metas de reducción de las emisiones de metano en sus contribuciones determinadas a nivel nacional, la inclusión de esas metas en sus planes nacionales, su presupuesto y sus procedimientos de inversión pública, y el diseño una serie de intervenciones financiables que inicien la senda para reducir las emisiones de metano en el sector agropecuario y los sistemas alimentarios.
La iniciativa contribuirá a poner de relieve las múltiples ventajas que ofrecen numerosas soluciones encaminadas a reducir las emisiones de metano. Por ejemplo, los enfoques que introducen mejores piensos también favorecen la salud y la cría de animales.
Las técnicas específicas para reducir el riego en los cultivos de arroz, o el uso de variedades de este cereal mejoradas que reduzcan el tiempo entre la siembra y la cosecha también permiten aumentar la producción.