El Ministerio intensificará a partir de noviembre los controles para regular la oferta de vino

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha concretado el calendario de medidas encaminadas a dar estabilidad y contribuir a la mejora de la calidad de los vinos, particularmente de los que se comercializan sin indicación geográfica. El Ministerio anunció el pasado mes de agosto mecanismos para regular el mercado del vino y contactos con el sector para impulsar las actuaciones más adecuadas.

Ahora ha anunciado que será a partir del 1 de noviembre cuando pondrá en marcha medidas para la intensificación de los controles de subproductos destinados a destilación, y el inicio de la campaña 2020/2021 para la norma de calidad y el mecanismo de regulación de la oferta de vino.

Según el Ministerio, estas medidas se traducen en una gran variabilidad de los precios, que traslada a los productores de uva de vinificación una presión creciente. El Gobierno ha detallado que se reunirá este mes de octubre con representantes del sector para impulsar estas iniciativas, que ya avanzó en verano.

Cabe recordar que la Interprofesional del Vino de España presentó el pasado mes de junio al Ministerio de Agricultura una propuesta cuya aplicación contribuiría a dar estabilidad y contribuir a la mejora de la calidad particularmente de los vinos que se comercializan sin indicación geográfica.

Algunas de las medidas propuestas, en concreto el control reforzado para mejorar la trazabilidad en el ámbito de la vertebración sectorial, ya se están aplicando en la presente campaña 2019/2020 gracias a la extensión de norma aprobada por la OIVE, por la que se extiende el Acuerdo de la Organización Interprofesional del Vino de España, al conjunto del sector y se fija la aportación económica obligatoria para realizar actividades de promoción e información del sector vitivinícola y sus productos, inteligencia económica, vertebración sectorial, investigación, desarrollo, innovación tecnológica y estudios, durante las campañas comprendidas entre 2019 y 2024.

Otra serie de medidas requieren la iniciativa de las administraciones, según el MAPA, por ello, hasta ahora, el Ministerio ha llevado a cabo un análisis de su viabilidad, así como de los instrumentos jurídicos más adecuados para ponerlas en práctica.

Las acciones previstas incluyen requisitos mínimos de calidad para uva de vinificación fuera de indicaciones geográficas de calidad (DOP o IGP); la intensificación del control de subproductos para destilación y mecanismos de regulación de la oferta del vino.

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