Los ministros y responsables de Agricultura de los nueve países mediterráneos de la Unión Europea, reunidos en Chipre esta semana, hicieron un llamamiento a favor de un «enfoque integrado» con el fin de garantizar la disponibilidad de agua para el sector agrícola europeo. En una declaración conjunta, exigen «flexibilidad y simplificación del marco financiero de la PAC para las medidas de gestión del agua».
Eso debe incluir «subvenciones para las inversiones de regadío» y dotar de «herramientas de adaptación y mitigación del impacto de la escasez de agua y la sequía en el marco de la PAC», agrega la declaración firmada tras la reunión de Famagusta (Chipre).
Al mismo tiempo, los representantes de nueve países mediterráneos, entre ellos España, piden «fomentar la investigación aplicada» para «contribuir a la gestión sostenible del agua» y «fomentar el uso de las tecnologías disponibles y las técnicas de fitomejoramiento para obtener variedades vegetales mejor adaptadas a la escasez de agua».
La reunión del llamado grupo MED 9, a la que acudieron ministros y responsables de Agricultura de España, Grecia, Chipre, Croacia, Eslovenia, Francia, Italia, Malta y también Portugal, llevaba el título «Amenaza de Sequía para el Sector Primario en los Estados Miembros Mediterráneos».
De hecho, los nueve países se comprometen a aplicar «prácticas sostenibles de gestión del agua» en la agricultura y adoptar «técnicas avanzadas de riego» y prácticas agrícolas que ahorren agua, incluyendo cultivos y variedades resistentes a la sequía.
Por otra parte, prometen reforzar la cooperación entre los países MED 9 y también con los demás países mediterráneos, cuyo sector agrícola también se enfrenta a la sequía y la escasez de agua.
Eso incluye apoyar la innovación y la digitalización en la producción agroalimentaria y la promoción del uso eficiente del agua como herramienta para adaptar la agricultura al cambio climático.