El presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, ha subrayado hoy -10 de mayo-la importancia de dar «certidumbre» al sector agroalimentario, que «contribuye al avance de toda España» y genera el 25 % del PIB regional y el 30 % de sus empleos. Por ello, ha señalado que los agricultores no pueden depender de si llueve o no, sino que es necesario garantizarles el agua a través de un gran pacto nacional que se base en tres pilares: la mejor utilización y gestión del agua, algo en lo que la región está muy avanzada; el uso del agua desalada siempre como complemento; y la potenciación de los trasvases.
En ese sentido, ha insistido en que es crucial «dar prioridad» a esas cesiones de caudales, siempre respetando la prioridad de la cuenca cedente y el la protección del medio ambiente, pero aportando el agua sobrante a las zonas donde hace falta, como la Región de Murcia.
López Miras ha participado en el segundo Foro Futuro en Español, que se ha celebrado en el Palacio Almudí de Murcia, en cuya jornada dedicada a los recursos hídricos también ha participado la ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, el alcalde de Murcia, José Ballesta, y diversos expertos de España, Chile y Perú.
En el encuentro la ministra ha defendido la necesidad de alcanzar un «gran acuerdo por el futuro del agua» en España, en el que se incluyan «infraestructuras» que garanticen interconexiones dentro de las mismas cuencas y «acopio de recursos» entre cuencas.
Además, ha subrayado el reto que supone la escasez de agua a nivel mundial y ha considerado que «este es un momento propicio para empezar un gran acuerdo por el futuro del agua» a nivel nacional.
Ejes del borrador del pacto
Asimismo, la ministra ha recordado que el actual borrador para ese pacto incluye cuatro ejes fundamentales, entre los que ha destacado la «atención a los déficit hídricos» de las diferentes regiones «garantizando la disponibilidad de agua para los distintos usos desde perspectiva integradora», para lo cual, ha dicho, las infraestructuras resultan «imprescindibles».
También ha defendido el impulso de recursos «no convencionales» como la desalación, el uso sostenible del agua y la modernización de los regadíos para un mayor ahorro de este recursos.
Por otro lado, ha insistido en el cumplimiento con los planes ambientales fijados en los planes hidrológicos de cuenca, que se concluyeron en la pasada legislatura «en tiempo récord», según ha recordado, después de 12 años sin llegar a acuerdos.