El secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, ha anunciado este jueves -26 de septiembre- en la tercera edición del foro `El Futuro en Español en Murcia´ que no se aprobarán más decretos de sequía, puesto que la previsión era sustituirlos por los nuevos planes.
El presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, había solicitado al Gobierno central, poco antes de las afirmaciones, que aprobase un nuevo decreto de sequía «de manera urgente», a pesar del episodio de gota fría sufrido a mediados de septiembre.
Según López Miras, las fuertes lluvias caídas en la Región durante los tres días que se prolongó la alerta, cayeron en zonas bajas de la cuenca del Segura, donde no se han podido recoger, de modo que las reservas regionales se encuentran al 27,6 por ciento de su capacidad.
Cuando se tramitó el decreto de sequía el Consejo de Estado advirtió de que no aprobaría más decretos de sequía, puesto que se trata de una medida excepcional
Por su parte, Morán recordó que cuando se tramitó el decreto de sequía actualmente vigente, el Consejo de Estado advirtió de que no aprobaría más decretos de sequía, puesto que se trata de una medida excepcional para hacer frente a situaciones excepcionales, e insistió en que el problema de la Región de Murcia es «estructural».
Por ello, según el secretario de Estado, para dar solución estructural a este asunto se aprobaron los planes de sequía de las cuencas que comienzan ahora su andadura, por lo que habrá que esperar para ver cuál es su capacidad de respuesta real.
A su juicio, con el actual plan de sequía están cubiertas el 90 por ciento de las necesidades de intervención, por lo que no debería haber problemas con estos nuevos planes: se está sustituyendo una «herramienta que jurídicamente ha sido cuestionada», como el decreto, por otra.
El trasvase «no da respuesta a la necesidad de agua»
En cuanto al trasvase, reconoció que «este país no puede prescindir de ninguna de las infraestructuras en las que ha invertido históricamente» para la gestión del agua, sin embargo, afirmó que «la infraestructura no da respuesta a la necesidad» de agua, que viene marcada por unos condicionantes externos, como es el cambio climático.
Por lo tanto, concluyó que «fiar a las infraestructuras existentes» la respuesta a ese nuevo escenario no sería responsable.