La Comisión Europea ha autorizado la comercialización de once nuevos maíces transgénicos para su utilización en alimentación humana y animal, pero no para el cultivo.
Se trata de variedades resistentes a depredadores y tolerantes a herbicidas obtenidas de la combinación de cuatro variedades ya autorizadas.
Sin embargo, hasta el momento Bruselas no ha tomado ninguna decisión sobre nuevas autorizaciones para el cultivo de transgénicos. Durante el verano propuso a los Estados miembros reanudar las discusiones sobre dos variedades de maíz pero no ha habido avances al respecto.